Va cambiando poquito a poco, tanto físicamente como personalmente. Ya no tiene tanta carita de bebe (aunque lo es), le va cambiando a niñita mayor, y personalmente va desarrollando su personalidad (y vaya que personalidad!!! tiene caracter la peque!!!).
Durante estos días, se ha dado su primer baño en la piscina y en la playa, ¡como le ha gustado!, le encanta el agua, y nosotros hemos disfrutado de ver lo feliz que era ella. Incluso llegué a emocionarme de ver como disfrutaba, como se divertía, como hacía cosas que hacen todos los niños, y que ella estuvo a punto de perderse...
Nuestros primeros dias con Sara eran sentimientos de ternura, de protección, de cariño,... ahora, 3 meses después de nuestro primer encuentro, nos vamos dando cuenta como los sentimientos cambian. Sara se está convirtiendo en parte de nuestras vidas, de nuestros sueños, de nuestro corazón, ahora los sentimientos han cambiado a un amor incondicional que no queremos cambiar por nada. Cada día que pasa sentimos con más intensidad lo que quiere decir la palabra: hija.
Sara te queremos a rabiar y no queremos dejar de disfrutar cada segundo a tu lado.
